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Aspirantado

Aspirantado

Se denomina Aspirantado al tiempo en que las jóvenes se acercan a la Vida Religiosa para comprender mejor el sentido de la misma. Este acercamiento lo hacen desde su respectiva familia, sin ningún compromiso con la Congregación.

Es el tiempo  de una intensa experiencia de vida cristiana donde se profundiza la consagración bautismal. Es también una etapa de conocimiento mutuo, de la joven con la Congregación y viceversa.  Durante un año, aproximadamente, la Congregación acompaña a la joven en su proceso de discernimiento a través de las hermanas promotoras vocacionales y le ofrece al mismo tiempo, un programa de formación integral y secuencial (jornadas mensuales y cursos ) que le ayuden a discernir su camino vocacional y clarificar sus motivaciones en orden a la Vida Religiosa.

La mejor respuesta que puedes dar es la tuya

La mejor respuesta que puedes dar es la tuya

La mejor respuesta que puedes dar es la tuya. Lo importante es que sepas decir como el profeta Samuel: "Habla, Señor, que tu siervo escucha" y también como María: "Sí, hágase".
Pero, cuidado: esa decisión hay que prepararla...
¿Cómo? A través del diálogo con una hermana y también por medio del contacto con fraternidades concretas.
Tras estos primeros contactos, después de haber vivido este tiempo de Aspirantado, tendrás una idea más clara de lo que significa la Vida Religiosa, así como de lo que es ser “Hermana de San Francisco”. Por ello, si sientes que el Señor te sigue impulsando a abrazar este estilo de vida, entonces estarás interesada en conocer, cómo se inicia uno a la vida religiosa franciscana.
Ésta se desarrolla en tres momentos importantes, hasta que el compromiso se hace definitivo. Las etapas son:
El postulantado.
El noviciado.
La profesión temporal.